El punto más importante es garantizar la calidad de la educación a los principales interesados.
La acreditación de la educación superior es una práctica que garantiza la calidad de una institución o programa a los estudiantes, sus familias, los empleadores, egresados y la sociedad en general. Debe formar parte del sistema de regulación, indicó María Elisa Zenteno, directora académica del Instituto Internacional para el Aseguramiento de la Calidad (IAC), división del Centro Interuniversitario de Desarrollo, CINDA."Estudiar en una institución acreditada le da la confianza a los jóvenes y sus familias. El proceso debe ser constante y orientarse a la mejora continua. Contempla un seguimiento de las acciones internas y externas de una universidad, además de la evaluación de normas, estándares y criterios sólidos a fin de salvaguardar el interés público", explicó.
Zenteno manifestó que los beneficios de estudiar en una universidad acreditada internacionalmente son muchos, pues permite el reconocimiento de la formación de un estudiante. Entre algunos mencionó los siguientes.
1. Confianza. Estudiar en una institución acreditada da a los jóvenes y sus familias la confianza de tener una formación académica adecuada. Cursar una carrera universitaria significa en muchos casos un gasto importante, y los procesos de aseguramiento de la calidad salvaguardan esta inversión.
2. Reconocimiento internacional. La acreditación de una universidad exige parámetros de calidad reconocidos en el mundo entero. Es así que un egresado de una institución acreditada puede acceder a una doble titulación internacional.
3. Aplicación a becas y financiamiento. Los estudiantes de una institución con procesos adecuados de formación tienen mejor perspectiva para acceder a becas o financiamientos en universidades.
4. Movilidad. La formación en una universidad acreditada también es valorada por los empleadores, no solo locales, sino también foráneos, lo cual favorece los procesos de internacionalización de los profesionales.
Según Zenteno, los beneficios de la acreditación son amplios, pero el punto más importante es garantizar la calidad de la educación a los principales interesados. En ese sentido, comentó que la mayoría de los países en la región cuentan con procesos establecidos de aseguramiento de la calidad. “Algunos, como Chile y Argentina, comenzaron la aplicación de mecanismos de aseguramiento de la calidad a finales de la década del 90, por lo tanto, cuentan con mucha experiencia. Otros, como es el caso de Perú, Uruguay y Paraguay, recién iniciaron su implementación”.
Creditos: Capital